¿Sabes qué es la dermatitis atópica? Aprende cómo identificarla y los tratamientos a seguir para que tu piel siempre esté perfecta. Esta enfermedad no solo afecta en términos de salud, sino también de belleza, pues puede causar un daño a tu autoestima.
La dermatitis es una enfermedad inflamatoria de la piel, pero el picor constante puede ser terriblemente perturbador, generando problemas para dormir, ansiedad, aislamiento y afectación en la vida diaria.
Suele ser duradera y empeorar de forma periódica, de acuerdo con Mayo Clinic; aunque no resulta contagiosa.
Sin embargo, en contextos escolares, la incomprensión, el bullying y el rechazo social empeoran el impacto emocional en niños y adolescentes.
¿Qué es la dermatitis atópica?
La dermatitis atópica, también llamada eczema, es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que causa brotes con picor, enrojecimiento y sequedad. No respeta edades: puede aparecer desde la infancia o más adelante, e incluso reaparecer tras estar controlada.
En los últimos años, la enfermedad ha tenido una presencia cada vez más notoria; es una afección crónica que se manifiesta en diferentes periodos de la vida. Y aunque no existe cura definitiva, existen tratamientos eficaces para aliviar síntomas y mejorar la calidad de vida.
Además, con hábitos sencillos como hidratación constante, el uso de productos dermatológicos o evitar irritantes, se pueden evitar brotes recurrentes.
¿Por qué aparece la dermatitis atópica?
- Genética
Las personas con antecedentes de alergia, asma o rinitis tienen más probabilidad de desarrollarla; además, hay defectos en proteínas clave como la filagrina, que debilitan la barrera cutánea, permitiendo el paso de alérgenos e irritantes.
- Piel debilitada
La piel pierde humedad de forma excesiva, se reseca y se fisura, lo que facilita que agentes externos penetren y causen inflamación crónica.
- Sistema inmunitario hiperactivo
Al dañarse la piel, el cuerpo produce una reacción excesiva que genera inflamación e intolerancia alérgica. Influyen el polen, ácaros, hongos, humo y ciertos alimentos como huevo o lácteos.
- Estilo de vida y ambiente
El frío, calor, sudoración, jabones agresivos, estrés y cambios hormonales son detonantes comunes de la dermatitis atópica. También es importante que no suela confundirse con otras enfermedades causadas por causas ambientales, como el sarpullido por calor.
¿Cómo identificar la dermatitis atópica?
Siempre es necesario que acudas con un especialista que te proporcione un diagnóstico certero sobre la dermatitis atópica, mediante un examen clínico y cuestionarios. Usualmente, no se requieren estudios de laboratorio a menos que sea necesario confirmar alergias o descartar otras enfermedades.
- Síntomas generales:
- Picazón intensa y persistente
- Rascado continuo
- Piel reseca, rojiza, escamosa, con posibles fisuras, costras y supuración
- Alteraciones del sueño y repercusión emocional: ansiedad, estrés, baja autoestima
- Distribución en la piel según la edad:
- Bebés (<2 años): mejillas, cuero cabelludo, pliegues de brazos o rodillas.
- Niños (2–12 años): pliegues articulares, muñecas, tobillos.
- Adolescentes/adultos: manos, pies, cuello; piel más engrosada.
¿Cómo tratar la dermatitis atópica?
La dermatitis atópica no tiene una cura, pero esto no significa malas noticias. Por el contrario, el tratamiento a seguir implica el cuidado constante y una rutina diaria hecha para tratarla.
La hidratación es la base del tratamiento, con emolientes que restauran la barrera de la piel, evitan brotes y alivian la comezón. Pediatras recomiendan aplicar crema dentro de los 3 minutos tras el baño, con productos sin fragancia, alcohol ni jabón agresivo.
En caso de ser necesarios los medicamentos, se recomienda el uso de corticoides tópicos en casos leves o moderados; inmunomoduladores tópicos que inhiben la inflamación sin esteroides. Así como la fototerapia o inmunosupresores sistémicos para casos graves o recurrentes. Para el uso y aplicación, debes consultar con un especialista.
¿Cómo prevenir la dermatitis atópica?
Para prevenir la dermatitis atópica es necesario identificar y evitar los desencadenantes que puedan irritar tu piel; por ejemplo, los jabones agresivos, cambios climáticos extremos, humo, ciertos alimentos, estrés y ropas sintéticas.
Y siempre mantener la piel hidratada correctamente, con los productos necesarios para su propósito.