Culiacán, Sin (RI Noticias).- El gobernador Rubén Rocha Moya anunció que se puso en marcha una estrategia para combatir el sobre poblamiento en los penales de Sinaloa, centrándose en la reubicación de reos y el fortalecimiento de la seguridad interna. La medida busca mitigar la violencia y mejorar las condiciones dentro de los centros penitenciarios, con el penal de Guasave emergiendo como una pieza fundamental en esta reestructuración.
Rocha Moya destacó una “revisión permanente diaria“ de la situación en las cárceles, haciendo hincapié en el penal de Aguaruto, en Culiacán, el cual ha sido escenario de diversas confrontaciones internas. Señaló con optimismo que, gracias a la colaboración con el poder judicial, ya no mandan por presos federales a Aguaruto, lo que ha contribuido a aliviar la presión sobre este centro.
“Hemos logrado por fortuna y que bien por los jueces que no nos manden ya, presos federales al penal, este es uno de las razones por las que hay esos encuentros (riñas) adentro. Las riñas no son exactamente por la sobrepoblación tiene que ver con que entran a penal los que traen rivalidad”.
Uno de los principales desafíos, comentó el gobernador, radica en las rivalidades preexistentes entre individuos que ingresan a prisión, las cuales se exacerban una vez dentro si no se logra mantener un control estricto sobre las armas. Aludiendo a los recientes “encuentros” o riñas que han requerido la pronta intervención de la Policía Federal y la Guardia Nacional.
La solución propuesta para desahogar Aguaruto y prevenir futuras confrontaciones es la redistribución de las personas privadas de la libertad (PPL). En este sentido, el penal de Guasave se presenta como la alternativa principal, dada su mayor capacidad. La intención es trasladar a los reos considerados “más peligrosos” o aquellos con rivalidades conocidas a esta instalación, buscando así, evitar enfrentamientos directos y mejorar la gobernabilidad en los centros penitenciarios, concluyó el gobernador.