La construcción de los más de 3 mil kilómetros de nuevas vías férreas durante esta administración federal en México avanza.
En la Mañanera de este 9 de julio, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que el Estado tiene capacidad de crear y desarrollar proyectos.
“El rescate de los trenes de pasajeros continúa, se acabó el periodo donde decía que el Estado no podía construir (…) el objetivo es México-Nuevo Laredo y México-Nogales”, sostuvo en Palacio Nacional.
Andrés Lajous Loaeza, director general de la Agencia Reguladora de Transporte Ferroviario, recordó que la construcción del AIFA-Pachuca inició en marzo, mientras que un mes después los trabajos para el Ciudad de México-Querétaro. En el caso de Querétaro-Irapuato y el Saltillo-Monterrey-Nuevo Laredo los fallos de la licitación se darán en agosto tentativamente.
“Nos 250 kilómetros que se harán con empresas constructoras una vez que se dé el fallo”, señaló.
Precisó que las rutas AIFA-Pachuca, Ciudad de México-Querétaro, Saltillo-Nuevo Laredo y Querétaro forman parte de la primera etapa. Querétaro-San Luis Potosí, Mazatlán-Los Mochis e Irapuato-Guadalajara, como la segunda etapa; Guaymas-Hermosillo, Guadalajara-Tepic, San Luis Potosí-Saltillo y Los mochis-Guaymas, tercera etapa; y la última es con Tepic-Mazatlán y Hermosillo-Nogales.
En total, para esta administración, se prevén 3 mil 435 kilómetros de vías férreas. En cuanto a los trenes eléctricos, para atender una demanda de 100 mil pasajeros diarios en el tramo Ciudad de México-Pachuca, con una duración de una hora y 15 minutos, se prevé adquirir 15 vehículos de este tipo.
Una velocidad máxima de 130 kilómetros por hora, longitud de 100 metros y permitirá acoplar dos unidades, capacidad de 700 pasajeros, con al menos 315 asientos ergonómicos, así como accesibilidad universal.
El proyecto de licitación fue publicado el 25 de junio y la convocatoria se da a conocer este 10 de julio. Tras las modificaciones legislativas en la materia, Lajous informó que se apuesta a fortalecer el papel del Estado como rector estratégico del servicio ferroviario y recuperar su capacidad de planeación, regulación y supervisión del sector.
Reactivar y priorizar el transporte ferroviario de pasajeros, así como expandir el servicio ferroviario de carga impulsando su infraestructura y conectividad nacional.
También proteger el interés público y el patrimonio nacional mediante medidas más estrictas para la administración, concesión y vigilancia de los bienes nacionales destinados al servicio ferroviario y establecer que las vías férreas seguirán siendo parte del dominio público de la federación.
