La propuesta para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales en México está por llegar al Congreso para su discusión legislativa.
Aunque los foros de diálogo ya concluyeron, el sector empresarial insiste en advertir sobre las posibles consecuencias del cambio a la Ley Federal del Trabajo.
Según reportó Informador, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) estimó que el impacto económico por trabajador sería de 65 mil 793 pesos al año.
El presidente de la Concanaco, Octavio de la Torre, desglosó así los costos adicionales:
- 6 mil 854 pesos por aguinaldo
- 5 mil 672 pesos por vacaciones adicionales
- 29 mil 917 pesos en seguridad social
- 23 mil 348 pesos por ajustes fiscales relacionados con la nueva jornada
Según De la Torre, estos montos podrían llevar a una microempresa a decidir “entre subsistir o cerrar”.
¿Qué preocupa más al sector terciario?
El comercio, los servicios y el turismo —que conforman el sector terciario— generan 65 de cada 100 empleos en el país. Su representante advirtió que las nuevas condiciones podrían dificultar la operación diaria.
Se pone en el dilema entre pagarle a su colaborador o mantener las puertas abiertas”, declaró De la Torre.
¿Qué proponen los empresarios?
Ante el cambio propuesto, el sector empresarial hizo varias solicitudes:
- Que el Gobierno asuma los costos fiscales que excedan las 40 horas semanales.
- Que no se cobre impuesto adicional por horas extra, incluyendo el Impuesto Sobre Nómina.
- Que se permita el salario por hora y se incentive la formalidad con deducción total de nómina.
- Que exista flexibilidad entre empleado y patrón, mediante acuerdo voluntario para elegir jornadas de 40 o 48 horas.
- Que las pausas laborales no cuenten dentro de las 40 horas.

¿Qué pasa con las pausas y horas extras?
De la Torre señaló que, en México, en la práctica, las personas trabajan 45 horas, no 48. También comparó con países europeos, donde las 40 horas laborales no incluyen pausas.
Agregó que regular las horas extra no debe implicar sanciones: “Las horas extras reguladas deben ser reguladas, no criminalizadas”.
Aseguró que muchas personas prefieren trabajar más para ganar más, con base en una encuesta citada. Por eso, explicó que se podrían aceptar esquemas de hasta 56 horas, siempre y cuando se paguen de forma adicional.
¿Qué sigue en el proceso?
La propuesta será discutida en el Congreso en los próximos meses. Mientras tanto, los empresarios siguen planteando que cualquier cambio debe considerar la realidad operativa de las empresas y los efectos económicos que esto podría implicar para empleadores y trabajadores.