El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa que puede ocasionar complicaciones graves, especialmente en niños pequeños, personas con enfermedades crónicas o con el sistema inmunológico comprometido, en algunos casos, incluso puede ser mortal.
Los primeros síntomas del sarampión incluyen fiebre alta (que puede llegar a los 40 °C), congestión nasal, tos, ojos enrojecidos (conjuntivitis) y pequeñas manchas blancas dentro de la boca, poco después aparece un exantema (ronchas pequeñas) que comienza en la cara y el cuello, y luego se extiende al resto del cuerpo, en personas inmunodeprimidas, pueden desarrollarse complicaciones como neumonía.
La rapidez con la que se propaga el sarampión se debe a su forma de contagio, la transmisión se da por contacto directo con gotitas respiratorias que se expulsan al toser, estornudar o hablar, basta con estar cerca de una persona infectada para contraer el virus, por ello, es importante mantener una higiene básica, como lavarse las manos con frecuencia, usar desinfectante, cubrirse con el antebrazo al estornudar o toser, y usar cubrebocas si se está enfermo.
Para más información sobre el sarampión, síntomas y vacunación, la Secretaría de Salud pone a disposición los teléfonos de la Unidad de Inteligencia Epidemiológica y Sanitaria: desde la Ciudad de México al 5337 1845 o desde cualquier parte del país al 01 (800) 00 44 800, línea gratuita.
¿Cuántas vacunas se necesitan?
No obstante, la forma más efectiva de prevenir el sarampión es mediante la vacuna triple viral (SRP), que protege contra sarampión, rubéola y parotiditis (paperas), es segura y eficaz, se aplica mediante una inyección en el brazo izquierdo. Está disponible en clínicas del IMSS y otras instituciones de salud pública, y basta con presentar la cartilla de vacunación para solicitarla.
El esquema de vacunación establece que se deben aplicar dos dosis:
- La primera dosis se administra a los 12 meses de edad.
- La segunda dosis se aplica a los 6 años, generalmente al ingresar a la primaria.
Si una niña o niño no ha recibido la segunda dosis a los 6 años, debe recibir una dosis adicional a partir de los 10 años, en caso de no haber recibido ninguna dosis previa, se deben aplicar dos dosis con un intervalo de cuatro semanas entre cada una.
Es importante tener en cuenta que, si estás embarazada, no debes vacunarte durante el primer trimestre. También se recomienda consultar con un médico antes de recibir la vacuna si padeces cáncer, VIH/SIDA, desnutrición u otra enfermedad que afecte el sistema inmunológico.