Culiacán, Sin. (RI Noticias).- Un intenso clima de miedo, provocado por la actual ola de violencia en Sinaloa, está silenciando a las familias de las personas desaparecidas, quienes por temor a represalias no acuden a presentar la queja formal ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH). Así lo advirtió el presidente del organismo, Óscar Loza Ochoa, quien señaló que existe una alarmante desproporción entre la magnitud de la crisis y las denuncias recibidas.
Detalló que mientras la cifra oficial de personas desaparecidas desde septiembre de 2024 ya supera las mil 450, el número de expedientes iniciados en la CEDH por estos casos es “corto” y no corresponde en lo absoluto con la gravedad de la situación. Esta discrepancia, aseguró, es un claro indicador del nivel de terror que se vive en la entidad.
“Algo ha pasado con esta ola de violencia que los miedos también se han incrementado con la media de la violencia, pues, porque se supone que un acto extremo es la desaparición de una persona y que esto debe mover a la familia. Una parte va y denuncia y pide también el apoyo de los grupos de familiares y una parte menor va y presenta quejas en alguna de las oficinas de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, pero no se corresponde con ese número tan grande que hay, pues, de desaparecidos, que andamos ya por arriba de los de los mil cuatrocientos cincuenta registrados”, enfatizó el titular.
Esta situación deja a miles de familias en un estado de vulnerabilidad y aislamiento. Aunque algunas buscan apoyo en colectivos o presentan la denuncia penal ante la Fiscalía, su renuencia a acercarse a la Comisión de Derechos Humanos evidencia el profundo temor que impera, un reto que, de acuerdo a Loza Ochoa, todas las instituciones deben abordar para poder brindar el apoyo que las víctimas necesitan, concluyó Loza Ochoa.