El sector empresarial de Sinaloa se mantiene atento ante la posibilidad de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, imponga un arancel del 30 por ciento a productos mexicanos a partir del 1 de agosto, lo que generaría afectaciones en ambos lados de la frontera.
Representantes del Centro Empresarial de Sinaloa y de la Alianza para el Desarrollo y Competitividad de las Empresas coincidieron en señalar que la medida impactaría negativamente a empresas exportadoras y productores sinaloenses, especialmente del ramo agrícola y manufacturero.
Aunque aún se desconoce con exactitud qué productos estarían sujetos a este nuevo arancel, se prevé que alimentos y manufacturas encabecen la lista. En el caso de Sinaloa, productos como tomate, granos y hortalizas, que se exportan principalmente a Estados Unidos, podrían enfrentar mayores costos, comprometiendo su competitividad.
Ambos organismos empresariales advirtieron que el arancel también tendría consecuencias para el mercado estadounidense, ya que los consumidores de ese país absorberían el aumento de precios en productos importados desde México.
Proponen diversificar mercados
Los empresarios hicieron un llamado a diversificar los mercados de exportación y fortalecer la presencia de productos mexicanos en regiones como Canadá, Europa y Asia. Asimismo, instaron a mantener el diálogo entre autoridades de ambos países para evitar una escalada comercial que perjudique la relación económica bilateral.
El empresariado sinaloense confía en que la medida no se concrete; sin embargo, afirman que ya se preparan estrategias para mitigar posibles impactos y proteger la planta productiva regional.