Mazatlán, Sin. (RI Noticas).- El panorama nacional requiere de voces que promuevan la rectitud y la justicia como pilares para el desarrollo de la juventud. En este contexto, Luis Mario Corrales, presidente de Jóvenes Empresarios de Coparmex, enfatizó la urgencia de inspirar a las nuevas generaciones a tomar el “camino recto” para salir adelante, una postura que resuena con la necesidad de reconstruir el tejido social del país.
Corrales destacó el ejemplo de Carlos Manzo, expresidente municipal de Uruapan que perdió la vida recientemente tras un ataque. Para el líder empresarial juvenil, Manzo representa a aquellos que “levantan la voz para reconstruir el tejido social”, un acto de valentía que, aunque trágico, debe servir de motivación y no de miedo para los jóvenes. Esta figura ejemplifica la importancia de participar activamente en la búsqueda de la paz y el bienestar comunitario, incluso ante la adversidad.
El líder de Coparmex enfatizó, que la violencia y la inseguridad son un desafío que afecta a todos, limitando el desarrollo y desanimando el emprendimiento juvenil. Sin embargo, en lugar de paralizarse, el legado de líderes como Manzo debe inspirar a seguir alzando la voz y encauzando a la gente hacia propósitos positivos. Corrales, como persona de fe, citó el Salmo 33:5 para reforzar su llamado a la perseverancia en la virtud: “Dios ama la justicia y nunca deja al justo. Nunca dejes de ser justo”.
Para Luis Mario Corrales, es fundamental que la juventud siga participando y opinando en temas que afectan a México, fortaleciendo los valores y el sentido social desde la base. La paz, afirmó, “se tiene que construir todos los días” con una sociedad unida y empática. La situación actual exige que los jóvenes no normalicen la violencia y trabajen de la mano con las instituciones, buscando la mejora continua en seguridad y justicia para garantizar un Estado de Derecho que permita la prosperidad.
Finalmente, dijo que la pérdida de figuras valientes debe interpretarse como una motivación para continuar la lucha. El mensaje de rectitud y justicia de Carlos Manzo, que trascendió fronteras, queda “grabado para el futuro”, siendo una causa que la actual generación de jóvenes debe asumir para asegurar que su legado no se apague y que el futuro del país se construya sobre bases de integridad y participación cívica.




