Ante el anuncio sobre la detección en México del primer caso de la variante K del virus H3N2, conocida como la “súper gripe”, es crucial saber qué vacuna está disponible para combatir este virus y proteger a la población.
El secretario de Salud, David Kershenobich, aseguró que existe una vacuna de producción nacional para proteger a la población.
Se trata de Meximvac, la vacuna mexicana contra la influenza que ha respondido de manera eficaz frente a la nueva variante K del virus de influeza H3N2, conocido como “súper gripe”.
David Kershenobich enfatizó que no se trata de una variante especial o desconocida. La vacuna contra la influenza que ya está siendo aplicada en México es completamente efectiva para prevenir este subtipo de H3N2.
“Queremos dejar señalado que el día de hoy es una variante que se previene con la vacuna contra influenza que tenemos disponible en México. No es una variante especial, sino que está dentro de nuestra vacuna y queda protegido”, dijo durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Llaman a la población a vacunarse
Kershenobich hizo un llamado a la población a participar en la campaña nacional de vacunación contra la influenza.
Indicó que a pesar de que la cobertura de vacunación se acerca al 50%, es fundamental alcanzar una cifra mayor para garantizar la protección colectiva. La prevención activa es la clave para enfrentar la temporada invernal.
La principal función de la vacunación es evitar casos graves, hospitalizaciones y muertes, un enfoque que el Secretario destacó como la base del mejor sistema de salud.
“Es un exhorto a que la población se vacune a que ustedes nos ayuden a comunicarnos para que se vacunen y recordar que el mejor sistema de salud es aquel que se enfoca en el tratamiento preventivo y no necesariamente en el tratamiento posterior de la enfermedad”, sostuvo.
¿Quiénes se deben vacunar?
La Secretaría de Salud exhorta a acudir a los centros de vacunación a los siguientes grupos:
- Niñas y niños de 6 meses a 5 años.
- Adultos mayores de 60 años.
- Personas con condiciones de riesgo preexistentes, como diabetes, hipertensión, enfermedad renal crónica, obesidad, asma o cualquier otra afección que comprometa el sistema inmunológico.
